Cada día que amanece, doy las gracias. A Dios, al Buda Shakyamuni, al Buda Milarepa y al Buda de la Medicina. Como también a mi Maestro Jesús que ha estado en toda mi vida. Que nos enseñó, el amor al prójimo, la humildad hacia todos los seres, la compasión hacia los enfermos , los que necesitarán la comprensión de sus corazones, afligidos. Por situaciones que no están al alcance de salir adelante. Por diversas situaciones que hayan vivido, en su pasado. El amor es la comprensión de cada uno, como seres que somos. De este hermoso planeta. Todos tenemos un valor espiritual. En nuestro cuerpo, palabra y mente. Somos esencia divina. Cuando nuestra humildad está presente en nuestro corazón. Es por eso que en esta semana santa es para reflexionar, lo hermoso que es nuestra vida, meditando para los que necesitan comprensión de cada ser sintiente. Como nuestro maestro Jesús nos vino a enseñar. Para iluminarse de corazón, orar, cantando mantras, arrepentirnos cada mañana, cada acción no benéfica que hayamos echo. Con cualquier ser sintiente. Para purificar nuestro karma cada vez que nos equivoquemos. Y perdonarnos para que puedan perdonarse así mismos. La sabiduría y la compasión es lo más sagrado que podemos alcanzar. Para sentir la paz y así iluminarnos del amor de Dios y de cada Buda. Y cómo también de seres divinos que existen en el mundo.🌎 El meditar orando para todos los seres, cuando estas enfermo, tiene un valor sagrado divino. Y sobre todo cuando ya hayas alcanzado la iluminación. Nuestro karma se consagra a lo divino y a la espiritualidad. Agradezco a todos los seres, monjes (as), sacerdotes, maestros (as) sagrados, al papa Francisco, a Dalai Lama por todo su amor, sabiduría y compasión hacia todos los seres sintientes. Y que tengan una vida larga es mi aspiración. Su Buda de amor y compasión los bendice, juntando mis manos 🙏🏻. Y su maestra de la divinidad medita con amor y humildad para nuestro maestro Jesucristo. Nos ilumina con su amor bondadoso de su corazón.♥️
Al escuchar mi corazón está Dios 